El telar de pedal de Barrio de Mexicanos

En el Barrio de Mexicanos de San Cristóbal de Las Casas sobreviven algunas casas de producción textil que en sus mejores épocas abastecieron de tela a cientos de mujeres indígenas para la confección de las “naguas” o enredos. Además de estas telas teñidas naturalmente con añil, los artesanos de telar de pedal tejen patrones de cuadritos y rayas jaspeadas, aunque ya sólo por pedido.

Para la colección de accesorios de hombre de Chamuchic hemos decidido integrar algunas de estas telas haciendo homenaje al oficio textil mestizo de San Cristóbal de Las Casas y le hemos pedido a Helena Rojas, blogger de Cata Creativa, nos hiciera el trabajo de investigación yendo con uno de los 3 artesanos que aún trabajan el telar de pedal en esta zona de la ciudad. 🙂

Telar de pedal en Barrio de Mexicanos

Por: Helena Rojas

En sus inicios todo el barrio se dedicaba al oficio del telar. Tiñendo naguas o simplemente reproduciendo patrones que posteriormente acabarían como indumentaria de interiores o vestimenta. Ahora sólo quedan tres familias dedicadas a ello y dos de ellas están por cerrar completamente su fábrica textil.

En una calle solitaria encontramos una casa de fachada sencilla, colorida y con el letrero “Se venden piñatas”. Es el marco perfecto para que Don Francisco Álvarez Montoya nos reciba e invite a pasar. Orgulloso de su labor, de su historia y por supuesto del telar, hace un recorrido por su lugar de trabajo y con melancolía nos cuenta lo siguiente:

“Tengo 73 años y comencé a trabajar el telar de pedal desde los 10 años, mi papá fue el que me enseñó el oficio y al él se lo enseñó su papá. Desde que tengo memoria, el telar era el oficio principal del barrio. Ahora ya todos los telares terminaron, porque los viejos ya no trabajamos como antes y los hijos ya tienen nuevos oficios; mis hijos saben trabajar el telar pero tienen otro trabajo para el que se prepararon.”

“En los buenos tiempos, se trabajaba con 4 telares, en estos días sólo tenemos 2. Hace un año todavía trabajaba más pero ahora se le paga a alguien para que llegue a trabajarlo y así se aprende.”

Don Francisco, todavía hace el procedimiento de preparar el hilo y lo tiñe, su día de pintar hilo es el lunes. Utiliza añil para color y granulada como fijador, cuando consigue sacatinta hace una mezcla para que el color quede mejor. El proceso es largo, porque va verificando que el color quede fuerte y uniforme en todo el hilo. Ya listo el teñido se pasa al telar para trabajarlo y hacer las famosas “nahuas” que vende con mujeres de comunidades indígenas.

Así nos explica de la venta y los pedidos de “nahuas”:

“Hace tiempo venían más a encargar sus “nahuas”, en ocasiones asociaciones campesinas completas encargaban telar, que repartían en sus comunidades por familia. Cada vez hay menos encargos pero todavía piden. Para el tejido de las “nahuas” se teje muy sencillo, no hay mayor dibujo porque las mujeres de las comunidades adornan las faldas con bordados distintivos; unen 2 cortes de lienzo para que de el ancho y en la unión bordan. Se vende el corte que son 5 varas y 5 varas son un metro. Aproximadamente se hacen 100 varas por semana.”

Don Francisco Álvarez Montoya ha sido entrevistado anteriormente para varias páginas de internet, revistas y el canal de televisión de Chiapas. Está nombrado en la reseña de investigación de Barrios de San Cristóbal que se hizo para la candidatura de Ciudad Creativa. Esperamos que su negocio retome el camino que todos los procesos artesanales están llevando.

La colección de corbatas hechas en telar de pedal en el Barrio de Mexicanos y confeccionada por expertos sastres mexicanos está disponible por el momento en el showroom de Chamuchic ubicado en Córdona 67 int 7 Colonia Roma, en la Ciudad de México.